Blanqueamiento dental: ¿Qué hay que saber?

Antes de empezar a hablar sobre hacernos un blanqueamiento dental, los tipos que hay, su precio, etc. ¿Sabemos qué es un blanqueamiento dental? o ¿qué tratamientos estéticos existen?

En ocasiones los dientes presentan una coloración inadecuada, más amarillenta de lo que desearíamos, y esto se debe a multitud de motivos. El blanqueamiento dental profesional puede ser una buena solución en determinados casos pero, para esto, lo mejor es que primero consultes a tu dentista.

 

¿Qué es un blanqueamiento dental?

El blanqueamiento dental es un tratamiento de odontología estética que tiene por objetivo eliminar las manchas dentales y hacer que la dentición adquiera una tonalidad más blanca y brillante. La actual popularidad de la estética ha convertido a este procedimiento odontológico en uno de los más solicitados de los últimos años.

Es de especial importancia que los dentistas estén capacitados para el manejo de los agentes blanqueadores, siguiendo un protocolo adecuado de diagnóstico, planificación del procedimiento y mantenimiento de los resultados. Por ello, es vital que el profesional conozca a fondo tanto las indicaciones como las contraindicaciones de las técnicas de blanqueamiento dental para poder transmitirlas a los pacientes.

 

Pero, ¿qué causa estos oscurecimientos en nuestros dientes?

El color de los dientes naturales se crea por la reflexión y la dispersión de la luz sobre el esmalte, que es la capa externa de los dientes, combinado con el color de la dentina que está debajo de él. El grosor y la suavidad del esmalte están determinados genéticamente.

El esmalte más delgado permite que se muestre más el color de la dentina. Es por eso que tener un esmalte más suave o más áspero también afecta en la reflexión de la luz y, por lo tanto, en el color. Diariamente, sobre el esmalte se deposita una pequeña capa de placa, adhiriéndose las manchas. 

 

Causas más comunes:

  • Tinciones por la alimentación:

Bebidas como el vino tinto, el té, el café o el refresco de cola, alimentos con colores fuertes, como por ejemplo, la remolacha, algunos tipos de carnes rojas, chucherías y salsas como ketchup o mostaza.

 

  • Tinciones por los malos hábitos:

El tabaco es uno de los principales agentes causantes de tinciones marrones a corto plazo y es responsable del color amarillento a largo plazo.

 

  • Tinciones por otras cuestiones:

1.El envejecimiento provoca que los dientes sean menos brillantes a medida que el esmalte se hace más delgado y la dentina se vuelve más oscura.

2.Las manchas que se localizan en el interior del diente se denominan manchas intrínsecas, dentro de las cuales se encuentran aquellas que afectan a los dientes en su fase de formación, antes de que erupcionen en la cavidad oral, causadas por el consumo de determinados medicamentos como tetraciclinas, por hipoplasias de esmalte, deficiencia vitamínica o fluorosis. También se clasifican en este grupo aquellas manchas que aparecen tras la erupción dental, producidas por golpes, fracturas o debido al paso del tiempo por envejecimiento de la dentición, que adquiere una tonalidad más oscura. 

3.Y las manchas extrínsecas o exógenas, se producen por el contacto de los dientes con agentes pigmentadores, presentes en determinados alimentos, bebidas como el vino, el té y el café, y otros productos, como el tabaco. Estas manchas también pueden producirse tras el uso prolongado de determinados colutorios orales y pastas dentífricas a base de Clorhexidina.

 

¿Todo el mundo puede hacerse un blanqueamiento dental?

La sonrisa es nuestra carta de presentación, por eso siempre queremos tenerla perfecta, esto implica tener los dientes blancos y sin mancha, pero no todas pueden someterse a un Blanqueamiento Dental. La condición fundamental es que el paciente tenga una buena salud bucodental.

Es decir, que no tenga caries, enfermedades periodontales y que tenga una buena higiene. Es imprescindible hacer un buen diagnóstico previo y no crear falsas expectativas.

Si estamos antes unos dientes sucios con placa bacteriana, unas encías deterioradas, caries u obturaciones filtradas no podremos realizar el tratamiento hasta que esos problemas hayan desaparecido.

Una sonrisa sólo será bonita si está respaldada por la salud oral.

 

¿Es doloroso?

El tratamiento del blanqueamiento dental no es doloroso. En algunas ocasiones puede producir una sensibilidad dental aumentada, pero es transitoria. 

 

Los límites del blanqueamiento dental

Los dentistas advierten de los riesgos para la salud de utilizar productos blanqueantes sin control. Lucir una sonrisa atractiva se ha convertido en una importante carta de presentación en la sociedad actual. Son numerosos los procedimientos dentro de la odontología para mejorar la estética bucal y uno de los más habituales es el blanqueamiento dental. 

Dado este creciente interés social por tener los dientes cada vez más blancos, los dentistas advierten de que el blanqueamiento, aunque es una técnica mínimamente invasiva, no es inocua para la salud y alertan de los riesgos de utilizar productos blanqueantes sin control.

Hay que ser realista y dejarse asesorar por el dentista sobre hasta dónde se puede llegar con los tonos de los blanqueamientos. Tener los dientes como la tiza puede no ser sano. 

 

¿Qué dice la legislación?

La legislación vigente establece que las concentraciones de peróxido de hidrógeno (el compuesto químico más utilizado para el blanqueamiento dental) por encima del 0,1% solo pueden ser distribuidas de forma exclusiva a los dentistas y que el producto únicamente puede ser empleado y aplicado por odontólogos y estomatólogos en una clínica dental.Una concentración igual o menor a 0,1% de peróxido de hidrógeno, presente en distintos productos bucales de venta directa al consumidor, se considera segura.

 

Riesgos para la salud

Pese a la claridad de la norma, el Consejo General de Dentistas de España ha denunciado en varias ocasiones que hay productos con altas concentraciones de agentes blanqueantes que se venden directamente al público, lo que, además de ser ilegal, pone en peligro la salud. Quemaduras, alteraciones en las mucosas, sensibilidad dental son algunos de los efectos secundarios.

Antes de iniciar un tratamiento blanqueante es necesario, en primer lugar, acudir al dentista, él realizará un diagnóstico y determinará el tratamiento necesario y el tipo de agente más adecuado para cada caso, además de descartar otros problemas de salud bucodental y evitar así posibles complicaciones. De existir caries, por ejemplo, estas deben ser tratadas antes del blanqueamiento.

Además, este procedimiento no está recomendado en pacientes con gingivitis u otras enfermedades periodontales. Tampoco antes ni inmediatamente después de haberse realizado un tratamiento de restauración dental. Son unas valoraciones que únicamente puede hacer el odontólogo. Asimismo, el profesional también deberá tener en cuenta otros condicionantes externos como el consumo de tabaco o alcohol, ya que pueden potenciar los posibles efectos tóxicos del peróxido de hidrógeno, recuerda el Consejo de Dentistas.

 

Tipos de blanqueamiento dental

La clasificación del blanqueamiento dental depende del diente al que se le aplica el procedimiento.

  • Blanqueamiento en dientes vitales. 

Este tipo de blanqueamiento puede ser de dos tipos diferentes:

1. Blanqueamiento dental realizado en la consulta odontológica. 

Se lleva a cabo en la clínica dental mediante la aplicación de un agente blanqueador a base de peróxido de hidrógeno al 35%, pudiendo ser este activado por una fuente de luz. Es necesario realizar previamente una profilaxis adecuada y revisar que la cavidad oral está sana.

Tras este paso, se aísla la zona a tratar, de manera que se evite el contacto del agente blanqueador con los tejidos periodontales y posteriormente se añade el agente blanqueador. Es imprescindible seguir las indicaciones del fabricante del sistema blanqueador para que los resultados sean satisfactorios.

Se trata del método muy eficaz, ya que se maneja una alta concentración del componente blanqueante bajo el control de un dentista.

2. Blanqueamiento ambulatorio con la supervisión de un dentista.

En este tipo de blanqueamiento la concentración de peróxido de carbamida es del 10%. Este método se realiza en el domicilio del paciente, bajo las indicaciones del dentista. Del mismo modo que en el blanqueamiento anterior, es necesario realizar antes del tratamiento una profilaxis y una revisión oral. Se elabora una férula a medida para el paciente en la que se aplicará el agente blanqueador, con el fin de evitar cualquier posible contacto con los tejidos periodontales.

  • Blanqueamiento en dientes no vitales

El motivo de la decoloración en dientes no vitales suele deberse a la presencia de productos hemáticos o bacterianos dentro de los conductos (necrosis pulpar). Este tipo de blanqueamiento se realiza en la consulta dental y consiste en la eliminación de todos los agentes decolorantes y tejido necrótico existente de la cámara pulpar en dientes endodonciados.

Existen dos métodos para blanquear dientes no vitales.

1. Técnica inmediata.

Consiste en activar la mezcla de perborato de sodio con peróxido de hidrógeno al 35% a través de un instrumento caliente. El resultado obtenido se observa al instante.

2. Técnica ambulatoria.

Se aplica la mezcla realizada con perborato de sodio (Amosan en polvo) y peróxido de hidrógeno al 35% (Superoxol), se lleva a la cavidad de la cámara pulpar y se coloca una obturación temporal en la superficie. Se trata de un proceso más prolongado.

También se puede llevar a cabo una combinación de ambas técnicas.

 

¿Cómo cuidar tus dientes después de hacerse un blanqueamiento dental?

Es importante saber que después de someterte a un blanqueamiento dental, tendrás que seguir una ‘dieta blanca’ durante 10-15 días, incluso hasta un mes. ¿Qué quiere decir esto? Pues que debes evitar alimentos y bebidas con muchos pigmentos o colorantes como el tomate, la zanahoria, los frutos rojos, las salsas, el chocolate, el vinagre balsámico, el vino tinto, el té, el café y las bebidas carbonatadas tipo cola.

Además, tampoco se debe fumar durante este periodo, para que el tratamiento sea un éxito.

1. Cepilla los dientes después de cada comida.

2. Evita fumar.

3. Reduce el consumo de té, café o alimentos con colorantes.

4. Tener una buena higiene bucal.

5. Cepilla tus dientes con más cuidado por la noche.

6. Algunas pastas blanqueantes son excesivamente abrasivas y pueden rallar el esmalte.

7. Acude a las revisiones que te recomiende tu dentista para controlar tu salud bucal.

 

¿Cuánto tiempo dura?

La duración del blanqueamiento dental depende de dos factores, el tipo de tratamiento que hayas elegido y sobre todo de la higiene bucodental que tengas. Los profesionales nos recomiendan hacer un mantenimiento periódico que consiste en ponerse unas férulas con gel de peróxido de hidrógeno durante una hora una vez al mes, además las férulas solo pueden aplicarse dependiendo del producto y del tratamiento.

Siempre se recomienda tener una jeringa de blanqueamiento en casa, y una vez al mes reactivarte el blanqueamiento con una puesta. El blanqueamiento no es eterno y requiere un mantenimiento, puede que pasados unos años sea necesario reforzarlo.