Existen ciertas creencias relacionadas con la salud dental que, con el paso del tiempo, se han ido afianzando entre las personas. En este artículo, te vamos a desvelar algunos de los mitos más relevantes:
- No hace falta cepillarse los dientes de leche.
Esta afirmación es errónea, ya que es fundamental empezar a desarrollar buenos hábitos desde pequeños, esto nos ayudará a tener una buena salud bucodental en el futuro.
- Después de comer hay que cepillarse los dientes.
Hay que esperar un período de tiempo (aproximadamente 20/30 minutos) para cepillarse los dientes después de cada comida ya que, al comer, se produce un cambio en el pH de la boca, la acidez aumenta y puede dañar el esmalte de los dientes.
- Los dientes quedarán más limpios si te cepillas con fuerza.
Cepillarse fuerte puede dañar los dientes y desgastar cierta parte del esmalte, así como provocar la retracción de encías y la aparición de caries.
- Los dientes blancos son dientes sanos.
Tener los dientes blancos no es sinónimo de buena salud dental, ya que el color de los dientes suele variar a lo largo de nuestra vida debido a la edad, la comida, el tabaco, una mala higiene bucal e incluso a algunos medicamentos.
- Los refrescos dietéticos son buenos para la salud bucodental.
Esta afirmación es incorrecta, ya que la acidez también daña los dientes, al igual que el azúcar. Las bebidas gaseosas sin azúcar pueden desgastar el esmalte y aumentar la sensibilidad de los dientes y provocar la aparición de caries.
- El hilo dental no es necesario.
Complementar el cepillo de dientes con el hilo dental es muy importante, ya que el hilo llega a zonas difíciles donde el cepillo no alcanza.
- Si comes azúcar, tendrás caries.
Es importante destacar que, si comes demasiado azúcar, aumenta el riesgo de aparición de caries pero, incluso si consumes una dieta baja en azúcares y no sigues una correcta higiene dental diaria, seguirás teniendo probabilidades de padecer caries.
- El enjuague bucal ayuda a combatir la halitosis.
El enjuague bucal es un complemento de la higiene dental que ayuda a mejorar el mal aliento en un período corto de tiempo, pero no es una solución permanente.
- El mal aliento es causado por problemas digestivos.
La halitosis o mal aliento es causado, en su mayoría, por la cavidad bucal. En nuestra boca conviven infinidad de bacterias y si no hay una adecuada higiene bucal, los alimentos producen compuestos sulfurados que ocasionan ese mal aliento.
- Una mujer embarazada puede perder los dientes por falta de calcio.
Durante el embarazo se producen alteraciones hormonales que pueden favorecer la aparición de gingivitis y caries, pero esto no quiere decir que ocasione la pérdida de dientes si se sigue una correcta higiene dental.
Una vez desmentidos estos 10 mitos, te animamos a que nos consultes cualquier duda poniéndote contacto con nosotros o acudiendo a nuestra clínica. PIDE YA TU CITA ¡Estamos encantados de atenderte!